Las artes marciales chinas, específicamente el Kung Fu, fueron desarrolladas simultáneamente con la introducción del budismo en China por Bodidharma, un monje proveniente de la India, quien se estableció en el templo de Shaolín en la provincia de Honan.
En el templo surgiría la escuela budista más importante de Asia central, el budismo Chan (Zen en Japón) y el Kung Fu chino, antecesor de todas las artes marciales orientales.
Wing Tzun (Wing Chun, Ving Tsun, vingtzun) fue desarrollado hace más de 250 años en el sur de China por Ng Mui, monja budista del templo Shaolín, y su alumna Yim Wing Tsun, en cuyo honor se nombra el estilo. Desde entonces el WT fue enseñado secretamente de persona a persona entre clanes y familias.
El gran maestro Yip Man, quien murió en 1972, fue el último maestro en enseñar exclusivamente a chinos. Su discípulo Bruce Lee fue el primero en enseñar el estilo en occidente y popularizarlo a través de sus películas en todo el mundo.